Por:Dr. Mario Raúl Mijares Sánchez.
Hay hombres que luchan un día y son buenos. Hay otros que luchan un año y son mejores. Hay quienes luchan muchos años y son excelentes. Pero hay los que luchan toda la vida: esos son los imprescindibles. Bertolt Brecht.
Zenyazen Escobar García, Secretario de Educación del Estado de Veracruz, dio un mensaje a los jóvenes estudiantes del nivel medio superior en El World Trade Center de Veracruz con motivo de la Feria Educativa. La verdad me sorprendió gratamente la consistencia y profundidad de su discurso, pues hizo gala de depuradas formas enunciativas, enfocando su argumentación en el futuro no sólo de los jóvenes sino del país y de Veracruz en particular. No cabe duda que al hombre se le conoce hablando o usando la palabra, y al político de acción por sus intervenciones en la tribuna o en la plaza pública.
Dentro de los cánones que rigen al discurso político se halla la inapelable necesidad de establecer una relación de cercanía con los oyentes, habilidad que sin lugar a duda es el signo característico del maestro Zenyazen a la hora de articular la exposición de sus ideas, lo cual es consecuencia, tal como él lo ha reiterado en varias ocasiones, de un camino de denuedo y lucha personal.
Al margen del destacado desarrollo de la disertación, también es digno de encomio señalar que, de manera valiente, expuso algunos pormenores sobre su vida personal: tropiezos, vicisitudes, tristezas, momentos aciagos, confusos… pero destacando la importancia de tener la firme voluntad de salir avante de las adversidades. En este sentido concuerdo plenamente con él, porque también considero que sólo el hombre que sabe levantarse puede dar razón de lo que conoce.
Es preciso subrayar que todas las cosas que experimentamos en la vida -infortunios, alegrías, dolor, pasiones- son vivencias que ayudan a fortalecer el temple de nuestra alma. Por ello, coincido a plenitud con lo que asevera el maestro Zenyazen Escobar, quien sostiene que cuando examinamos nuestro pasado junto con la realidad en que vivimos, en ese momento cesan los extravíos, dotándonos precisamente de ese estado emocional indispensable para alcanzar la sabiduría.
Con toda sinceridad doy testimonio de que el mensaje que sostuvo el Secretario de Educación fue impactante dada la franqueza y la pasión expuestas en cada palabra.